Remote Operate Vehicle. Conoce la tecnología ROV
Vehículo submarino no tripulado que alcanzan hasta 2.000 metros de profundidad.
El estudio del fondo marino es algo fascinante y, gracias a la tecnología actual, podemos contar con dispositivos capaces de recopilar datos de manera remota, a la vez que se respeta la preservación del lecho oceánico.
Uno de los equipos que mejor cumplen esta tarea, es el submarino ROV (Remote Operate Vehicle). Un vehículo adquirido por el IOE (Instituto Español de Oceanografía), suministrado y desarrollado por Casco Antiguo. El ROV, permite sumergirse a grandes profundidades y analizar las profundidades de manera completamente remota, por lo que es ideal para la exploración de los océanos.
Una de las últimas misiones de este dispositivo fue la búsqueda y recuperación de los cuerpos de Anna, Olivia y Tomás Gimeno, por lo que los usos de este equipo abarcan diferentes ámbitos y pueden cumplir diferentes objetivos.
Este vehículo submarino no tripulado, puede operar a más de 2.000 metros de profundidad, por lo que es una herramienta indispensable en las operaciones más complejas. Puedes consultar aquí las especificaciones técnicas de este asombroso vehículo.
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